lunes, 28 de febrero de 2011

La mestressa del bloc de mar


L’aigua calenta queia sobre la seva cara de llavis
inflats per tantes hores de pràctica amb el so característic de la pressió de la dutxa. No tenia gaire interès a sortir de sota el ruixat artificial, però uns sons molt familiars li van fer tancar  l’aixeta. La veïna del quart tornava a tocar el violí amb el seu talent innat; les notes semblaven explicar un secret que només ella podia interpretar. Es va quedar allà escoltant, palplantada en silenci, amb les gotes d’aigua regalimant-l’hi per una pell que no trigaria a envermellir-se a causa de l’al·lèrgia a la humitat. 
La màgia sonora va fer una pausa i es va quedar sola, amb el goteig  metàl·lic sobre el fons moll de la banyera.  
Es va mirar les puntes dels dits marcades per una línea profunda, com una incisió per, amb una ganyota emmarcant-li la cara, tornar a obrir l’aixeta i submergir-se novament sota la
pluja vaporosa.

viernes, 25 de febrero de 2011

La Mestressa del celobert

Sentia com el fum li recorria els pulmons i, a
ordre seva, com era expulsat per la boca. Les cendres del cigarret es
precipitaven al petit pati del celobert.
Totalment repenjada a l’ampit de la finestra,
amb els braços penjant al buit i la vista perduda, desfruitava d’aquell petit plaer que li proporcionava la planta seca del tabac.
Però com tot petit plaer, dura poc. Incrèdula,
va fitar la burilla, culpant-la de la seva rapida consumició i va fer-l’hi l’última calada. Va sospirar i, amb un gest de resignació a la cara, tancà la finestra amb un cop suau.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Secuestro

El miedo presionó sus entrañas cual martillo de plomo segundos antes de que la bilis decidiera remontar en sentido opuesto para quemarle el esófago como ácido sulfúrico precipitado por error. El sudor frio que le emanaba de la frente parecía poseer  también esa misma cualidad destructiva, hiriéndole la piel tras su paso dejando largas cicatrices secas  sobre una dermis tensa e inquieta.   Hizo el intentó de tragar saliva pero en eso se quedó, en intento, pues no tenía substancia acuosa que deglutir. Sus irregulares y forzosos jadeos le dilataban los orificios nasales pretendiendo estabilizar una respiración dolorosa y casi inexistente.   Los ojos se agitaban inquietos en sus corneas escrutando en búsqueda de una luz más reveladora que la estresante bombilla roja ahorcada por una soga de cable pelado que colgaba por su crimen en el techo.  A cada leve ruido un espasmo le recorría el cuerpo, de la cabeza a los muñones que tenia por piernas, podía notar como se le apretaban las ligaduras en las muñecas.   
“Putos cabrones de mierda hijoputas subnormales.”
“ Hay que ser realmente imbécil para intentar sacar dinero de un vagabundo minusválido.” “Hay que joderse.”
Entonces deseó morirse; un hombre había entrado en la raquítica habitación bajándose los pantalones y dejando a lucir un poderoso pene en erección.

** E aquí la primera. Quizás un poco chungo para empezar ..  

Decir hola no es siemper simple


Bien, supongo que al tratarse de la primera actualización no estaría de más que hiciera una pequeña presentación. 

A lo largo de las interminables (e innumerables) horas de aburrimiento procedentes de las aulas y creadas por los individuos de las mismas, centenares de pequeñas y breves historietas  nacieron de mi  mente bilingüe y enfermiza para mezclarse entre apuntes, da
Bien, supongo que al tratarse de la primera actualización no estaría de más que hiciera una pequeña presentación. 

A lo largo de las interminables (e innumerables) horas de aburrimiento procedentes de las aulas y creadas por los individuos de las mismas, centenares de pequeñas y breves historietas  nacieron de miente bilingüe y enfermiza para mezclarse entre apuntes, datos históricos, ecuaciones, fotografías, análisis morfosintácticos y ejercicios varios (para que negarlo, sin finalizar). Muchas se perdieron y hora, simplemente, tratare de que quede constancia de ellas en algún lugar ya no solo para mi, si no para que cualquier otro pueda leerlas.

Y eso es todo por esta vez